11 septiembre, 2010

Prefiero quedarme en la nada.

La vida marcha lenta

acariciándome al despertar 

la vida me llora, me susurra

me asalta en el pasado de golpe

me grita el conocimiento

la masa, me apunta

mis ojos vidriosos de vino tinto

crispan entre las avenidas

Sigo aquel canto moribundo

caminando...

Masticando mi suerte bohemia.

Prefiero quedarme en la nada,

en la nada.-